Cápsula Bíblica 497

Hay, en la Biblia, hechos muy significativos que hablan de la importancia de leer, estudiar y meditar la Palabra, como ese cuando Moisés deja este mundo y Dios insta a su sucesor Josué a vivir a diario de acuerdo con las Escrituras, unas Escrituras que debe leer y meditar varias veces al día:  “Solamente esfuérzate y se muy valiente para ocuparte de actuar conforme a la ley que mi siervo Moisés te mandó. No te apartes de ella ni a la derecha ni a la izquierda, para que prosperes en todo lo que lleves a cabo. Nunca debe apartarse de tu boca este libro de la ley, sino que, por el contrario, de día y de noche, meditarás en él, para que lo guardes y actúes de acuerdo con lo que se halla escrito en él; porque entonces lograrás que tu camino prospere y todo te saldrá bien”  ( Josué 1,7-8 ).