La Biblia nos dice que en el tiempo de Jesús había partidos polítivos con diversas tendencias como en nuestros tiempos. Sin embargo lo más probable es que Jesús no perteneciera a ninguno de esos partidos. Simplemente era solidario con el pueblo en general. Investigaciones recientes han intentado situarle en distintos contextos de su tiempo: rabinos carismáticos de Galilea, predicadores cínicos itinerantes o incluso celotas revolucionarios, pero Jesús no se deja encerrar en ninguna de esas categorías.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario