Para leer la Sagrada Escritura ya sea personalmente, ya sea comunitaria mente, hay métodos muy diversos y variados. Cada persona o grupo podrá escoger y adaptar el que más le convenga; pero de cualquier manera, al leerse la Biblia se deben tener en cuenta las siguientes indicaciones: respetar el sentido del texto bíblico, comprender en la situación actual el sentido del texto y aplicar la Palabra de Dios a la vida.
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