domingo, 19 de agosto de 2018

«COMPARTIR A DIOS EN LA RED»... Un libro sobre Redes e Internet

Hace unos meses, Fátima y Mike me regalaron este libro: «Compartir a Dios en la Red». ¡Y vaya que se los agradezco! En él me he basado para dar varias conferencias en diversos espacios del buen uso de «Internet» y de las «Redes Sociales» (El Diccionario de la Real Academia Española registra estas palabras con minúscula pero reconociendo también su uso con mayúscula inicial). En el mundo actual, en que Internet ya forma parte integrante de nuestras vidas, al igual que las Redes Sociales, puede afirmarse que el ciberespacio se ha convertido en una nueva realidad existencial humana.

Evangelizar en el tiempo de las Redes Sociales ha dejado de ser una extravagancia o algo solo para las nuevas generaciones. Yo no me coso al primer hervor y he descubierto en estos medios un espacio maravilloso y sin fronteras para llevar a Dios hasta los últimos rincones en donde haya Internet. La Red domina de tal manera los sistemas de comunicación que todo pasa por ella. La Iglesia y el Evangelio la necesitan. La necesitan porque el ambiente en el que se desarrolla nuestra entera existencia en el hoy, en el aquí y ahora, es el de la Red. Desde la Red y por medio de la Red el ser humano busca, se relaciona, discierne, convive y comparte sus respuestas y sus preguntas. También las que tienen como centro el Evangelio.

La sociedad creyente, cimentada en esta época que nos ha tocado vivir, en las redes de conexión, comienza a proponerse unos desafíos muy significativos tanto en la pastoral como en la comprensión misma de la fe cristiana, comenzando por su lenguaje expresivo. Los retos son exigentes. Y nuestra tarea no lo es menos. Estas páginas son de gran ayuda para aprender a desenvolverse en el ciberespacio.

Antonio Spadaro es jesuita, es uno de los colaboradores más cercanos del papa Francisco en redes sociales y ciberteología. En unas cuantas páginas, el autor afirma que el crecimiento de la comunidad cristiana en Internet no significa únicamente introducir temas religiosos, sino sobre todo desenvolverse en este ciberespacio con un estilo y un comportamiento de apertura y diálogo.


Antonio Spadaro,
"Compartir a Dios en la red",
Ed. Herder,
Barcelona 2016,
66 páginas.

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