domingo, 14 de agosto de 2016

«INTRODUCCIÓN A LA VIDA DEVOTA»... Un tesoro de San Francisco de Sales.

La «INTRODUCCIÓN A LA VIDA DEVOTA» (1608), es una obra clásica de la espiritualidad católica, uno de los escritos más característicos de San Francisco de Sales, el santo obispo de Ginebra. La afabilidad de temperamento, la cortesía de gentilhombre y la erudición humanística que distinguían a este santo obispo, impregnan cada una de sus páginas, y contribuyen de gran manera al objetivo principal del libro, que es hacer de la vida «devota», es decir una vida dedicada al amor de Dios y del prójimo, algo accesible y atrayente para todos los estados de vida y condiciones sociales: clérigos y laicos, religiosos y misioneros, hombres y mujeres, célibes y casados.

La piedad que nos presenta este santo autor, se opone radicalmente tanto al intolerante puritanismo de los calvinistas como al rigorismo que algo más tarde pretenderían imponer dentro de la Iglesia los jansenistas; y sin ampliar —cosa imposible— el camino estrecho de la perfección, lo despeja —al decir de algunos céelbres estudiosos de la piedad cristiana— de malezas y piedras que lo obstaculizaban. La «INTRODUCCIÓN A LA VIDA DEVOTA» resume, en lenguaje llano y estilo ameno y cálido, los tesoros de la ascética de los santos padres, de la edad media y de la época moderna en la que vivió el autor, adaptando todo a las situaciones concretas de sus lectores, no todos llamados a la vida monástica, pero no por eso excluidos de la vocación a la santidad.

San Francisco de Sales fue un hombre descendiente de una noble familia italiana de Saboya. Nació en el castillo de Sales, cerca de Annecy, en el año de 1567. Estudió en París con los jesuitas, como alumno externo, retórica y filosofía, y luego, en Padua, continuó sus estudios de Leyes. De regreso en Saboya, decidió —contra los deseos de su padre— hacerse sacerdote. Ordenado en 1893, predicó varios años en el Chablais, sobre el lago Leman, tierra entonces asolada por los conflictos con los calvinistas, y convirtió a miles de éstos. En 1602 fue hecho obispo de Ginebra, donde desplegó una fecunda acción apostólica durante 20 años. Escribió muchas cartas y algunos tratados, y fundó con Santa Juana de Chantal la orden de la Visitación. Falleció el 28 de diciembre de 1622. Es Doctor de la Iglesia y Patrono de escritores y periodistas.



Francisco de Sales,
"Introducción a la vida devota",
Ed. San Pablo.

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