Acabo de leer este libro de Dawn Eden, una escritora estadounidense católica, convertida del judaísmo que es tan amante de la música como yo, porque se desempeñó, en la década de 1990 como periodista musical. Dawn perdió la fe cuando era una adolescente y se convirtió al agnosticismo (hay tan de moda) y, a los 31 años, se convirtió al cristianismo para luego, finalmente, integrarse a la Iglesia Católica obteniendo el año pasado (2016) el doctorado en Teología Sagrada por la Universidad de St. Mary of the Lake en Illinois.
Estas páginas, lo adentran a uno en tres personajes, hombres de una fe profunda que son, indiscutiblemente, muy buenos guías para lograr una transformación interior para alcanzar metas más altas de santidad: San Ignacio de Loyola, San Pedro Fabro y el papa Francisco.
Eden, combinando las enseñanzas sobre la misericordia de Dios en estos tres grandes hombres, con los recuerdos dolorosos de su vida pasada, como mujer que pasó por una tormentosa historia, nos muestra cómo la misericordia de Dios puede ayudar a sanar y a estar en paz internamente para crecer en la fe haciendo memoria de la obra que Dios ha hecho en nuestras vidas. Los pasos que propone la autora, están inspirados en el legado de estos tres hombres de Dios cuyas vidas y enseñanzas han sido inspiradoras para miles de creyentes en el mundo.
Dawn Eden,
"Nunca olvides la misericordia de Dios",
Ed. Planeta,
México 2016,
156 páginas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario