El vals es una de las manifestaciones musicales de importancia que se cultivó y disfrutó entre los diferentes segmentos sociales y culturales de México en el transcurrir del siglo XIX, y la primera década del siguiente. Los investigadores no se ponen de acuerdo de su llegada a nuestra tierra, algunos la sitúan en el período independentista, otros afirman que es a la consumación de la Independencia cuando sucede su arribo a la música nuestra; sin embargo coinciden al señalar que en el Imperio de Maximiliano, el vals recibió apoyo oficial para cautivar a los melómanos. Las obras destacadas de la época son de origen centro-europeo, algunas surgen producto de compositores mexicanos o residentes como este vals que hoy les invito a escuchar.
El vals «Amor» de Felipe Villanueva es una prueba de ello. Villanueva nació en Tecámac, —hoy llamado Tecámac de Felipe Villanueva—, una pequeña población del Estado de México
el 15 de febrero de 1862 dejando este mundo apenas a los treinta y un años en la ciudad de México. Ejecutante del piano y del violín, pedagogo y compositor, Felipe Villanueva nos deja en esta composición una joya musical de ese género con una muy especial delicadeza que envuelve.
Se puede decir, sin exagerar, que a pesar de lo corto de la pieza, es una música cautivadora. Una composición que para ser interpretada requierede un arte de la musicalización extremo.
«Amor» es una de sus piezas que lo llevó a ser profundamente valorado más allá de nuestro México lindo y querido.
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