martes, 6 de diciembre de 2016

Cápsula Bíblica 2117

A veces hay cosas que parecen insignificantes y que Dios sabe tomar muy bien para transformar vidas. En el libro de los Jueces, una quijada de asno es una de las cosas más insignificantes que se mencionan en este libro, pero que Dios condescendió en utilizar. Dios sabe cómo sostener a aquellos que pelean sus batallas. Sansón, luchador guerrero, demostró que las fuentes de Dios se abren donde menos se las espera y, con una quijada de burro, derrotó a los filisteos (Jue 15,18).

No hay comentarios.:

Publicar un comentario