Cápsula Bíblica 2438

Si lees el capítulo 18 del segundo libro de los Reyes, te toparás con uno de los más grandes prodigios que Yahvé hizo en el Antiguo Testamento. El año 701 a. de C. cuando Jerusalén estaba a punto de caer en manos de sus enemigos, Dios la salvó milagrosamente. Hoy Dios sigue haciendo prodigios y nos libra de las garras dele enemigo si buscamos la gracia.