domingo, 28 de abril de 2013

«MOBY DICK»... Una novela que puede incluso convertirse en una alegoría de la vida actual

Esta semana presento un libro fascinante que muchos hemos leído y re-leído. «Moby Dick» es una novela de Herman Melville, publicada en 1851 que narra la travesía del barco ballenero Pequod en la obsesiva y autodestructiva persecución de una gran ballena blanca impulsada por el capitán Ahab. Poseedora de una magia muy especial que hace de ella un libro en donde se puede tener un sin número de lecturas, «Moby Dick» puede incluso convertirse en una alegoría de la vida actual, donde muchos, al igual que los hombres a bordo del Pequod, pierden la vida siguiendo a un líder que ha perdido la razón y al que no entienden, pero que los atrapa en el vértigo de su propia locura. Por eso me ha parecido interesante leer o re-leer este libro.

La lucha del capitán Ahab, su terrible obsesión y la mítica persecución de la enorme ballena han traspasado fronteras, consiguiendo así la indiscutible categoría de obra maestra de la literatura universal. Esta ballena representa un monstruo de las profundidades, percibida por Ahab como un engendro del mal que ataca y destruye todo. Sin embargo la ballena no deja de ser una fuerza de la naturaleza, porque la ballena es un animal que lucha por sobrevivir, ajeno a todo rencor, a todo sentimiento humano y es el hombre el que debe comprender.

La historia es conocida de sobra por el mundo entero y es una de esas que nunca nos cansaremos de leer o ver llevada a la pantalla. Junto al valiente Ismael y el rudo capitán Acab, uno se va no solamente tras de Moby Dick sino tras de muchas cosas de la propia vida. Es curioso, pero pero como en muchos otros casos relacionados con la literatura y la música, la novela no tuvo ningún éxito comercial en su primera publicación, aunque con posterioridad haya servido para cimentar la reputación del autor y situarlo entre los mejores escritores estadounidenses.Interpretada y adaptada de múltiples formas y en diferentes medios (desde 1926 en el cine mudo, películas dirigidas por famosos directores como John Huston y Orson Welles, hasta caricaturas como la que en 1967 Hanna Barbera hizo para la televisión) Moby Dick ilustra los escenarios de sus viajes, sus inquietudes filosóficas y la dualidad que se encierra en todas las criaturas.

Quisiera animar al que aún no la haya leído  a que se arriesgue a navegar por estos peligrosos mares que son la imaginación. La novela ha influido mucho en la literatura universal y en muchos campos más. Como dato curioso final puedo mencionar a tres jóvenes de nuestra época, que egresados de la universidad, unieron esfuerzos para realizar uno de sus máximos sueños, fundar una compañía de café, la cual recibió el nombre del primer oficial ballenero de la novela de Herman Melville, Moby Dick: Starbucks.

"Moby Dick",
Editorial: Círculo de Amigos de la Historia
276 páginas.

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