Cápsula Bíblica 1460

Una de las diferencias más grandes entre los cristianos católicos y los cristianos protestantes, en cuanto a la lectura de la Biblia, consiste en la doctrina llamada del «libre examen», una doctrina sostenida por todos los protestantes, y según la cual cada individuo tiene derecho a interpretar libremente la Sagrada Escritura, cosa que lleva a crear situaciones muy especiales y que facilita la tendencia a «acomodar» los textos para digan lo que la persona quiere expresar y no lo que Dios marca. En la Iglesia Católica toda interpretación está avalada por el Magisterio y la Tradición.