domingo, 11 de octubre de 2020

«Tercer cuarteto para cuerdas en mi bemol mayor»... Una composición de Juan Crisóstomo Arriaga

Desde que a finales del siglo XIX fuera parcialmente recuperada y dada a conocer, la obra de Juan Crisóstomo Arriaga no ha dejado de despertar la admiración del mundo musical y el reconocimiento de que la prematura desaparición del artista español ha privado a la historia de la música no sólo de un genio individual sino posiblemente de un importante eslabón evolutivo.

Arriaga compuso tres cuartetos que fueron escritos en París y publicados en una edición de 1824 con el nombre de Premier Livre de quatuors. Pueden calificarse como obras de madurez relativa, dada la temprana desaparición del compositor, y sorprenden por su excelente factura: riqueza melódica, enorme precisión técnica en el tratamiento contrapuntístico de las partes, y por una tendencia al alejamiento de los modelos establecidos, introduciendo innovaciones en la disposición de los movimientos y la estructura de los mismos, con una inventiva reveladora del genio precoz de su autor.

Hoy les invito a escuchar el Cuarteto no 3 en mi bemol mayor, que es el más elaborado de los tres desde el punto de vista técnico: del unísono inicial en el Allegro pasamos al intercambio concertante de motivos entre instrumentos, con un interesante desarrollo de trazo modulante fuertemente expresivo. El segundo movimiento es una Pastorale en vez de Adagio, en varias secciones, con efectos descriptivos como el trémolo que imita una tormenta, llevando Arriaga el discurso temático a su máxima expresión en el último movimiento Presto agitato.

Disfruten:

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